En su libro "Volverse Público", la primera gran maravilla que resaltaremos es el manifiesto del cambio de paradigma de la escritura. Groys expresa la necesidad de escribir desde la poética y no desde la estética. Esto significa escribir "no desde la perspectiva del consumidor de arte, sino desde la del productor". El filósofo agrega: "si alguien aborda el arte desde una posición poética, técnica y autoral, la situación cambia drásticamente... Como productor visual, uno opera en un espacio mediático en el que no hay una diferencia clara entre los vivos y los muertos ya. que ambos están representados por personas igualmente artificiales. Por ejemplo, las obras producidas por los artistas vivos y las producidas por los muertos habitualmente comparten los mismos espacios en los museos -el museo es, históricamente, el primer contexto del arte construido artifcialmente. Lo mismo puede decirse sobre Internet como espacio que tampoco diferencia claramente entre vivos y muertos".
Saltando algunos pasos del razonamiento vemos que Groys ha empezado a pensar ya desde la figura del que produce y no del que consume por la condición que la época impone . El filósofo nos habla de la estadística en tres épocas:
"en los siglos xv y, cuando se inició y desarrolló la reflexión sobre el arte, los artistas eran minoría y los espectadores, mayoría... El arte debía formar el gusto y desarrollar la sensibilidad estética, el arte como educación de la mirada y demás sentidos. La división entre artistas y espectadores parecía clara y socialmente establecida: los espectadores eran los sujetos de la actitud estética, y las obras producidas por los artistas eran los objetos de la contemplación estética. "
"Pero al menos desde comienzos del siglo xx esta sencilla dicotomía comenzó a colapsar..."
"Actualmente, cada persona debe establecer su propia imagen en el contexto de los medios visuales. Y no es solo en el famoso mundo virtual de Second Life donde uno crea un avatar virtual como un doble artificial con el que comunicarse y actuar""
Lo que estaría ocurriendo según "volverse público" es que "el acceso relativamente fácil a las cámaras digitales de fotografía y video combinado con Internet -una plataforma de distribución global- ha alterado la relación numérica tradicional entre los productores de imágenes y los consumidores. Hoy en día, hay más gente interesada en producir imágenes que en mirarlas...En estas nuevas condiciones, la actitud estética obviamente pierde su antigua relevancia social"
Agrega: "Hoy en día, no son solo los artistas profesionales, sino también todos nosotros los que tenemos que aprender a vivir en un estado de exposición mediática, produciendo personas artificiales, dobles o avatares con un doble propósito: por un lado, situarnos en los medios visuales, y por otro, proteger nuestros cuerpos biológicos de la mirada mediática".
Un podcast y el mismo libro para descargar y ampliar.
Todo lo dicho pone al mundo del arte en la conciencia de nuevas condiciones. Los hacedores profesionales de la cultura compiten en un campo global abierto donde cualquier ser humano puede emitir mensajes estéticos, aún más, donde todos nos vemos instados a producir contenidos que nos representen. Para el autor, esto no es el fin del arte, ni mucho menos. Seguiremos escarbando en este intenso mundo de ideas que reduce a nuestro colectivo a jugadores en igualdad de condiciones con el infinito plano dado.