Con la intención de expandir la dimensión ritual y ceremonial de su música, además de profundizar el aspecto intuitivo, Braxton desarrolla el concepto de Ghost Trance Music (Fantasma Trance Música). La idea de generar una música holística que integre mente, cuerpo, lo conocido, lo desconocido y la intuición devino en este concepto de música tricéntrica (Ver diagrama).
En palabras de Haring (2006), la idea de GTM está vinculada con los "Rituales de Danzas de Fantasmas" de fines del s. XIX, que surgen con los restos de las culturas de los originarios de norte de américa, diezmadas por el proceso de "civilización". En este contexto, las culturas sobrevivientes se juntan y comparten sus legados. Allí, los "Rituales de Danzas de Fantasmas" emergen como una cortina: de un lado está la realidad de los seres humanos, y del otro, el territorio de los ancestros. El pulso estable sobre corcheas, se diseñó como una plataforma para el estado de trance. GTM es una especie de experiencia de trance donde los fantasmas del pasado y los del futuro deben juntarse.
Ante la pregunta, ¿Cómo se toca esta música?, encontramos un material increíble de Erika Dicker. Parafrasearemos algunos fragmentos. Por empezar, tendremos una versión expandida de la idea de "Territorio Primario". Aquí encontramos: 1- Melodía Primaria; 2-Un material secundario; y 3-Un material terciario.
La melodía primaria es una línea ininterrumpida de notas, diseñada para leer en unísono por cualquier cantidad de músicos, tocando cualquier instrumento. Los ejemplos a la derecha, son diferentes melodías primarias, de complejidades muy distintas. En la tercera, podemos ver cuadrados, triángulos y cuadrados acoplados a las notas, símbolos que representan portales: lugares desde donde o hacia donde moverse, dentro del ciclo ritual.
El triángulo es una invitación a moverse hacia otra zona de notación o "identidad estable". Esta otra zona corresponde a otra hoja de material escrito. El cuadrado es una ruta hacia un material pre seleccionado terciario, o uno traído de afuera.
Antes de la performance, estas piezas son seleccionadas por el
intérprete y puede estar tomado de cualquier parte de la obra de
Braxton (de toda su carrera).
El círculo es una invitación a la improvisación libre, o dentro de un lenguaje de improvisación. Un lenguaje posible puede ser el de las "Unidades Sonoras". Los intérpretes deben improvisar y conducir a los otros, usando gestos y marcando el número de tipología de lenguaje que se usa, con sus dedos.
Todo este material se lee en "Clave Diamante", una clave que permite que cada intérprete lea en la clave que elija. Nota de color: el material secundario suele estar encarnado en una partitura de notación gráfica, como la que exhibimos a continuación.
En cuanto a accidentes, referidos a alteraciones en las notas, Braxton usa los comunes (sólo se aplican a la nota donde están escritos) y suma el concepto de "Accidente abierto", que se simboliza con una estrella. El intérprete debe decidir allí si toca sostenido o bemol. Esto genera una variación por disonancia, en ensambles grandes.
Asistimos así a una especie de sistema que engloba toda la literatura del compositor, incluída su concepción de la improvisación libre. En GTM, a un golpe de vista, puede verse esta condición de la música de Braxton, que se resume en una serie de axiomas que señala Braxton (a través de Haring: 2006):
1- Todas las composiciones de mi sistema musical pueden conectarse entre sí; 2- Todas las partes instrumentales en mi música son autónomas; 3- Todos los tempos en este
"estado musical" son relativos; 4-Todas las
dinámicas, en este mundo sonoro, son relativas.
Concluímos la publicación con dos materiales, una versión vocal de una selección de piezas de GTM y una entrevista, que lamentamos no esté traducida. Aún así, creemos que puede verse algo del espíritu de esta música en la escucha cruzada de ambos materiales, uno situado en la energía del vivo, el otro en la efervescencia del ensayo .